Y entonces le dije: “Gracias por considerarme tu competencia, pero no la tengo y esperaría que vos tampoco.”
Ahora Marian es consciente de su valor, desencadenando así, una serie de eventos afortunados.

Hay muchos profesionales y empresas haciendo lo mismo que nosotros, pero nadie lo hace como nosotros.

En nuestro interior hay un diamante que aguarda ser descubierto, ese diamante es nuestro valor diferencial. Quienes estén dispuestos a tomar el pico y cavar hacia lo profundo de la montaña de lo común, lo encontrarán.

Tanto seamos profesionales, emprendedores, pyme o empresa, sin importar el tamaño del negocio.
Cualquiera que tenga un negocio DEBE encontrar y saber comunicar su valor y olvidarse de la competencia. Si quiere mejorar su negocio, lógicamente.

Cuando sabemos lo que valemos (y lo hacemos valer), podemos encontrar el famoso diferencial de marca, pero ese ya es tema para otro artículo.
Los valores no se dicen, se demuestran.

No nos diferencia decir: “Nuestros valores son la honestidad y el profesionalismo, estamos siempre a la vanguardia de (ingresa aquí lo que sea que vendas)”
Mejor demostrémoslo en el primer mensaje al cliente.

Beneficios de conocer el valor de nuestra marca:

-Un norte para todo el equipo de trabajo
-Fidelidad de acciones
-Coherencia en la comunicación
-Saber decir que no a un cliente, si no condice con los valores de marca.

Y por si esto fuera poco:

-Estamos dispuestos a pagar más por una marca que transmita valores que inspiren, sino, consigan una ouija y pregunten a Steve Jobs.

¿Necesitas ayuda con los valores de tu marca? Haz click acá