Alfred Hitchcock no recibió un solo peso de la Paramount para difundir su película: Psicosis. Así que echó mano del método AIDA (storytelling y copywriting miamor). Para captar ATENCIÓN, generar INTRIGA, inminente DESEO y llevar a la ACCIÓN.

¿Cómo lo hizo?
Con creatividad y originalidad.
No solo rompió con todas las reglas estéticas de la época (60’s), saliendo él mismo en las gráficas señalando su reloj, además se leía un texto que decía:
“¡HAY QUE VER PSICOSIS DESDE EL PRINCIPIO!”
(Ya tiene mi atención y me intriga saber por qué tanta puntualidad.)

Los textos promocionales decían así:

“El director de este cine ha recibido instrucciones, a riesgo de perder su vida, de no admitir a ninguna persona después de que comience la película.
Cualquier intento de entrar por la puerta lateral, salidas de incendio, o los conductos de ventilación será enfrentado a la fuerza.
El objetivo total de esta política extraordinaria, por supuesto, es ayudarle a disfrutar más de PSICHO.
¡No cuenten el final a sus amigos!
Alfred Hitchcock”

(¡Daría cualquier cosa por sacarme la duda!)
La llamada a la acción o call to action (hoy sería un botón: -Comprar ticket-) eran los horarios disponibles para ver la peli.

¿Qué consiguió con esto?
Todo el show en torno a la película, amplificado por policías en las salas para evitar la bronca de los espectadores que llegasen tarde.
Crearon colas interminables de un público deseoso de descubrir qué tipo de historia podría necesitar semejante dispositivo de seguridad.

Alfred Hitchcock fue, es y será el gran maestro del misterio y la originalidad, así que si él utilizaba este método, nosotros deberíamos probarlo en nuestras redes sociales, publicidades, sitio web, y toda herramienta de comunicación y marketing de nuestra marca.

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